Por cierto, me encanta el detalle: es el amanecer (o atardecer) y el sol todavía ilumina con sus rayos anaranjados, mientras que el tejado de la casa y el pájaro están ya en la penumbra. Es algo que probablemente sólo sucede unos segundos al día (a no ser que la casa esté a la sombra de una montaña o de un edificio más alto, en cuyo caso sucederá durante más tiempo).
Da la impresión de que a llegado volando y se ha quedado allí cual pajarraco ¡!
ResponderEliminarSí, es el Cristo más grande del mundo, pero insignificante junto a un pájaro...
EliminarOLI I7O
Por cierto, me encanta el detalle: es el amanecer (o atardecer) y el sol todavía ilumina con sus rayos anaranjados, mientras que el tejado de la casa y el pájaro están ya en la penumbra. Es algo que probablemente sólo sucede unos segundos al día (a no ser que la casa esté a la sombra de una montaña o de un edificio más alto, en cuyo caso sucederá durante más tiempo).
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